En talleres, naves de producción o laboratorios, los incendios suelen originarse donde convergen el calor, la electricidad y los materiales: en máquinas, compresores, armarios de control o en zonas con polvo y aceite.
Incluso un solo fallo técnico puede bastar para paralizar las operaciones y, con ello, los plazos de entrega, las cadenas de suministro y todo el proceso de producción.
Solo un tercio de las empresas afectadas sobreviven a un incendio. El 43 % de las empresas que no pueden reanudar sus operaciones de inmediato quiebran; otro 28 % quiebra en los siguientes tres años. La tasa de supervivencia es alarmantemente baja y demuestra la importancia crucial de la protección preventiva contra incendios para el futuro de una empresa.
TUNGUS se desarrolló precisamente para este tipo de situaciones. Nuestros módulos reaccionan automáticamente a los aumentos peligrosos de temperatura y extinguen el fuego antes de que se propague.
El polvo extintor especialmente desarrollado tiene un doble efecto: extingue las llamas de forma eficaz y moja las zonas circundantes, evitando así que se conviertan en focos de incendio. Esto significa que los incendios no solo se extinguen, sino que también se controlan de forma sostenible, una diferencia crucial con respecto a los sistemas convencionales.
El polvo es ecológico, no tóxico y no conductor. Se puede aspirar fácilmente sin dañar la maquinaria, los equipos ni los componentes electrónicos. Esto suele permitir que la producción se reanude poco después del incidente, sin tiempos de inactividad ni daños posteriores.
Debido a la gran diversidad de aplicaciones industriales, todos los módulos TUNGUS se utilizan en este sector. Ya sean máquinas individuales, secciones o líneas de producción completas, TUNGUS ofrece protección a cualquier escala para la seguridad de sus empleados y el futuro de su empresa.
Consultas y ofertas individuales


















