Los incendios en salas de electrónica, racks de servidores o paneles de distribución suelen comenzar de forma imperceptible: causados por componentes sobrecalentados, fuentes de alimentación defectuosas o polvo acumulado con el paso del tiempo. Los primeros segundos determinan si solo se trata de un cable carbonizado o si se desata un incendio que lo paraliza todo.
Un incendio de estas características implica mucho más que daños materiales: se pierden datos, sistemas, horas de trabajo y, a menudo, la confianza de los clientes. El temor a la interrupción del servicio está justificado, ya que el calor, el humo y el agua para extinguirlo suelen destruir por completo los componentes electrónicos sensibles.
TUNGUS ofrece protección precisamente donde los sistemas convencionales reaccionarían demasiado tarde. Nuestros módulos detectan los aumentos de temperatura con antelación y extinguen el fuego automáticamente, incluso antes de que aparezcan las llamas.
El polvo extintor utilizado no es conductor, no es tóxico y no deja residuos en los equipos técnicos; se puede aspirar fácilmente sin dañar los componentes electrónicos. No produce corrosión ni humedad, y no causa daños posteriores.
Si se solicita, TUNGUS también puede integrarse con sistemas modernos de detección y alarma para enviar señales inmediatas a los sistemas de seguridad, los sistemas de gestión de edificios o al operador en caso de incidente.
